Tengo una amiga, que tiene una tienda de ropa y complementos en la plaza . Solemos pasar muy buenos ratos charlando cuando la visito. Nuestra amistad, ha nacido con naturalidad, soy aficionada a la moda, me encánta la ropa y empecé a frecuentar su tienda en cada temporada.
Mi amiga, es una mujer apasionada de su trabajo. Vá, cada temporada a distintas capitales, para encargar la ropa que quiere vender y me cuenta ilusionada a su regreso,las nuevas tendencias y lo que ha visto en las pasarelas. Cuando llega el cambio de temporada, tiene un trabajo enorme. Retirar la ropa antigua para poner la nueva en las estanterias, reponer los escaparates, con la ropa que ha traido nueva...
Es una mujer trabajadora. Cada mañana, madruga y deja su casa lista para cuando regrese. Su marido, le ayuda en las tareas de la casa. Aún así, para estas mujeres, la responsabilidad, es doble, cuidar de su casa y su negocio. Ella por ejemplo, tiene los hijos mayores independizados, pero la mayoria tiene hijos pequeños a su cargo.
Su trato a la hora de lidiar con la clientela, es exquisito. Se requiere mucha dosis de paciencia, cuando precisamente, la clienta, quiere el modelito del escaparate. Hay que desvestir el maniquí con todo lo que eso conlleva...la mayoria de las veces, no se llevan la prenda, pero mi amiga Belen, como es una estupenda profesional, no se inmuta...los trabajos cara al público,solo los tendrian que realizar personas serenas, con temple, con don de gentes.
Los pequeños negocios, donde la calidad del trato, es especial, tienden a desaparecer. Los grandes almacenes, donde el anonimato es la esencia, cópan el sector. Allí cada uno se prueba a su manera, deja la ropa de cualquier manera tambien, sin dar apenas cuenta a nadie.
Mi amiga, me ha hablado de que quizá pronto lo deje. Es una verdadera pena, pero se merece un descanso.
Se quedará ese rincón sin vida...la vida que mi amiga, le daba.
12 comentarios:
Hay establecimientos en los pueblo que adquieren una personalidad propia y se la dan al lugar en el que están, y es verdad que da pena que este tipo de pequeños negocios cierren sus puertas para siempre. Saludos.
Pero ella empezará a vivir de verdad, ¿no?. Mírale el lado bueno.
Es una pena que haya gente que no sepa apreciar el trato directo y personal dependiente/cliente, yo creo que se debe a la mala costumbre que hemos tomado de grandes almacenes y mercadillos.
Sería una pena la desaparición de esa tienda, al fin y al cabo, son los pequeños comercios los que dan vida a nuestros barrios.
Un beso.
Tengo verdadera fobia a las grandes superficies. No me gusta comprar nada en grandes tiendas donde tu eliges, nadie te orienta y luego te vuelves loco para encontrar la caja donde tienes que pagar.
Lamentablemente esto se esta imponiendo y cada vez desaparecen mas pequeñas tiendas de esas del amigo de toda la vida.
Como tampoco me gusta hablar por telefono con contestadores automáticos. Quiero personas, seres humanos. Pero se impone la comodidad, la tecnología y las malas costumbres, porque las buenas eran las de antes.
Menos mal que ahora, tras la jubilacion, me las arreglo con un jersey, una camisa, un patalon jean y unos zapatos comodos y si tengo frío aun me quedan dos chaquetones, uno de tela y otro de lluvia, de los viejos tiempos.
Un beso y a tu amiga dile que haga lo que mas le conviene, porque hoy no se puede competir con eso que llaman "grandes áreas" y que, en el fondo, son refugios contra la lluvia y lugares de espacimiento.
Un beso
¿Sabes el encanto de tu prosa mari paz? la sencillez. es una narración sin pretensiones, fluida, que cualquiera se identifica con tus letras. me has hecho estar ahí
un besote y buen finde
La verdad es que queda poca gente como tu amiga. Existe poca gente con paciencia y mano izquierda en los comercios. Todo se está llenando de jovencitos hastiados que nos miran como perdonándonos la vida.
Un beso.
totalmente de aduerdo contigo.
Que bello es hacer lo que te gusts.
Elije un trabajo que ames y te guste y jamas trabajaras en kla vida.
Cada vez son menos lo negocios que te atienden personalizadamente, por eso a mi me encanta ir al centro y comprar en las tiendas de siempre, se saben como nos llamamos, nuestros gustos. Mi esposa compra en una corseteria que se saben la talla de todas las mujers de la familia , pero lo mas grande es que saben incluso cuando han subido de talla, y eso no te lo da el corte ingles.
Enhora buena por vuestra amistad.
feliz fin de semana
Pues es una pena que una mujer tenga que abandonar lo que más le llenaba y una pena que tu no puedas llenar ese rinconcito de amistad que compartias con vuestro gusto por la moda.
Buen fin de semana
Besos!
En Madrid, ultimamente, se están recuperando antiguos mercados, remodelándolos, y el pequeño comercio parece que quiere volver a ser lo que era. Yo al menos, la carne, el pescado, la verdura, me gusta comprarlo en el mercado, al peso, y en cuanto a la ropa y zapatos, igual, me gusta que una dependienta o dependiente, me asesore, y me ayude a encontrar lo que busco. Odio los centros comerciales, el trato es poco humano, y yo me lio cuando tengo que ir a alguno. Un beso
Desgraciadamente nos hemos acostumbrado a salir de compras y a ser nosotros los únicos y últimos protagonistas de esta tarea. A mí me encanta salir de compras y que alguien con buen humor y destreza en la palabra me atienda y me muestre un montón de prendas o útiles entre los que escoger. Un saludo y anima a tu amiga a que continúe dando buen servicio y atención a los compradores.
Pero bueno ¡esto qué es! ¿además de reportera eres estupenda modelo? Así se explica que vistas con tan buen gusto. Me encanta los colores que eliges. Un abrazo.
Hola, muchas gracias por vuestros comentarios.Mañana, me acercaré con el ordenador a la tienda y la leeré vuestros comentarios.Estoy segura que le hará mucha ilusión.
Como dice Maria Jesus, descansará cuando deje de trabajar.
Podré verla, aunque no sea en la tienda, pero mi vocación de modelo, como dice Alfonso, se va a ir al garete...jajajaja
Un abrazo para todos
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