El mes pasado he querido inaugurar en el Baúl una nueva sección titulada: "El personaje del mes". Quiero hacer desde este rincón un pequeño homenaje a esas personas anónimas conocidas solo de su familia, amigos, vecinos y dejar constancia de su valiosa vida.
Hace unos días fallecía Isabel Lora. Una extraordinaria mujer andaluza de mirada expresiva y cautivadora que con su peculiar gracejo andaluz iluminaba las calles del pueblo. Este pueblo que no era el suyo. Había nacido en Fuentes de Andalucía, provincia de Sevilla el 26 de Marzo de 1922.
Fu la mayor de diez hijos de José y Ángeles, aunque uno murió muy pequeño. Su padre era herrero y su madre se dedicaba a las labores del hogar. Con nueve hijos no le faltaba faena.
Isabel, desde muy pequeña se fue a vivir con sus abuelos maternos que se llamaban Salvador y Dolores, y con cinco tíos hermanos de su madre.Vivía con sus abuelos y visitaba a sus padres y hermanos a menudo.
Su abuelo, Salvador, era zapatero y su tío Leovigildo y Celedonio trabajaban con su padre haciendo zapatos.
Su tío Eulogio era barbero. Sus tías Encarna y Herminia eran modistas, y con ellas aprendió a coser desde muy pequeña y con catorce años ya le hizo un vestido a su hermana Amalia.
La costura era su pasión y lo hizo a lo largo de su vida hasta cuatro o cinco meses antes de morir.
Cuando era joven y vivía en Andalucía, no había mucho trabajo, pero ella siempre encontraba algo.
Isabel quería aprender a leer y a escribir y por las noches iba a clases.
Cuando estalló la guerra tenia catorce años y ya se sacaba unas perras escribiendo cartas para hijos y novios. Realizó trabajos muy distintos, trabajando en una fábrica de vegetal, limpiando una farmacia, cosiendo en las casas, blanqueando fachadas, cogiendo aceitunas y trabajando en tareas del campo.
Trabajando en el campo conoció a Manuel, un buen mozo que era primo de su amiga Rosario.
Manuel era natural de Lora del Río y tenia 25 años, tres años más que ella. Estuvieron tres años de novios y el quince de Septiembre del 1947 se casaron en la iglesia de Lora del Río. Se casó a las ocho de la tarde y la boca costó ocho pesetas.
Isabel, se casó con un vestido que se había hecho ella misma. Aunque fuera mayor de edad tenían que firmar los padres dando la autorización.
Al año siguiente nació su primera hija Mercedes, cuatro años mas tarde su hijo Manuel, y al año siguiente su hijo José, los tres en Lora del Rio
.
El trabajo escaseaba y lo poco que había estaba muy mal pagado y con tres hijos decidieron irse de Lora.
Manuel, tenia un amigo de su pueblo llamado Jose Gil, conocido como ("El Chochillo") que se había venido a trabajar a las minas de Guardo.
Con su ayuda se vino a estas tierras, primero el solo, y a los tres meses vino Isabel con sus tres hijos en el tren hasta León, con un atillo de ropa nada mas.
Isabel cuando llegó aquí y lo vio todo tan negro por el carbón, le decía a Manuel, que donde le había traído...
Ella venia de una tierra de pueblos blancos.
Gracias a la buena gente que encontró en estas tierras, enseguida se adaptó, al frío, a la nieve,al carbón...
Pero como decía ella, había trabajo y comida para mis hijos y eso era lo verdaderamente importante.
En el Paralelo nació su cuarta hija, Gelines.
Después, vivieron en una casita en el barrio de Valdecastro, donde nació su hija mas pequeña, Loli
.
Rodeada de su familia en un homenaje que le hizo el Ayuntamiento.
Mientras, Isabel, llevaba la casa y seguía cosiendo ya con una máquina que habían podido comprar.
Aunque añoraban su tierra, aquí se encontraban muy bien.
Cuando sortearon las casas baratas y les tocó una, por ser familia numerosa, Isabel siempre decía que era la mayor lotería que le podía haber tocado en su vida.
Era una casa pequeñita para siete personas, pero tenia todo lo que ella necesitaba.
Ahí siguió viviendo hasta su muerte. Nunca quiso comprar un piso mas grande porque la tenia mucho cariño. Eran muchos años viviendo en la misma casa y todas las vecinas la querÍan y respetaban.
Soñaban con volver un día a su tierra pero solo volvieron de visita.
Su Andalucía querida, siempre la llevó en el corazón y en su acento, porque aunque vivió muchos años en Guardo, nunca lo perdió.
La tierra que la acogió con los brazos abiertos cuando era joven, también la ha acogido cuando se ha hecho mayor y reposa junto a su marido en el pueblo que tanto querían.
Poema para Isabel
Seis hilos callados
seis hilos que lloran
seis hilos de tu costura
seis hilos de mi guitarra
por una estrella mas en el cielo
hace que me olvide
de todos los malos momentos
Pero mi guitarra es
la cajita donde guardo
mis sentimientos
Se ha ido una madre
una amiga, una vecina
una trabajadora y
una luchadora incansable.
Pero no se ido del todo
porque los rayos del sol
la luz de las estrellas
y la luna en el cielo
harán que cada día
permanezca a nuestro lado.
P.D. Me he limitado a transcribir lo que su hija me ha enviado. No por ello he dejado de vivírlo mientras lo escribía con mucha emoción.
La vida de Isabel, como muchas otras vidas que dejan huella en las personas que la amaron y en la sociedad que habitaron, es el mayor regalo para la humanidad.
Isabel y Manuel, descansan en paz junto a su hijo Manolo en esta tierra castellana que les dio cobijo.
