4 de noviembre de 2010

El silencio

El silencio lo envolvía todo. Solamente se escuchaban voces en el fondo de su alma. En diálogo consigo misma escudriñaba el fondo de su corazón sin aspavientos, serenamente, aprovechando la lucidez mental de la que disfrutaba en aquel momento.
Como luces de bengala aparecían en su mente los sucesos de su larga vida como algo lejano, aunque muchas veces los tenia presentes con una intensidad que le hacia sufrir.
Solamente en el silencio interior tenia capacidad para relativizar los instantes pasados, los buenos y malos momentos, los días vividos intensamente, como queriendo acariciar la vida al caer la tarde.
La mayoría de las veces vivimos inmersos en nuestras propias palabras que revolotean a nuestro alrededor como mariposas de colores con la fugacidad de la belleza externa, como algo etéreo que se desvanece en un soplo.
Solo en el silencio nos podemos encontrar con el meollo de nuestro propio ser con toda la riqueza y las bajas pasiones que anidan agazapadas en un lugar del corazón.
Ratos de soledad para mirar de frente al infinito, silencios para atesorar la vida que aun nos quede por vivir.


18 comentarios:

HUMO dijo...

Leyéndote, me has hecho emocionar!

Un fuerte abrazo!

=) HUMO

MAMÉ VALDÉS dijo...

El silencio algunas veces da miedo y otras nos relaja, pero tenemos que recordar que solo es silencio.

Veo que sigues con el problema de las fotos, un saludo.

A Tony en "El Corral de Trapito" tampoco le suben las fotos, pero no le dicen nada de que tenga el espacio ya lleno, porque hace poco tiempo que lo tiene, son los misterios de la blogosfera.

Dilaida dijo...

A mi me gusta vivir en los dos extremos, de vez en cuando necesito barullo y si no lo tengo me deprimo, y sin embargo otras veces me encuentro muy bien, sólo con el ruido de mis pensamientos.
Bicos

Elena dijo...

Ah el silencio, escucharlo es la mejor manera de oírnos a nosotros mismos.

Un beso Maripaz.

ARO dijo...

Los sonidos del silencio. A veces son tan necesarios... Ahora voy a retirarme unos días para buscar un poco de calma.

Thiago dijo...

Jaja pues verdad. Es muy raro lograr ese momento de silencio...Desde luego en una casa o en una ciudad ya ni hablar. Por eso me gusta irme por ahi en la bici, salir al campo y perderme por los caminos. Ese silencio de verdad, ese silencio telúrico en el que te sientes completamente frente a ti mismo es un momento muy especial, solo frente a tus recuerdos, ideas y anhelos...


Bueno, ya me callo para no romper el silencio jajaajaj

mariajesusparadela dijo...

Para mi, el silencio es calidad de vida.

Darío dijo...

Hay algunos silencios dolorosos. Pero otros, ahhhhhhhhhhh, como dice Mariajesús...calidad de vida, si!

Decoaire dijo...

Hola Maripaz!
Me alegra tener noticias tuyas,te doy las gracias por adelantado por lo de las fotografias que tienes y aprovecho para mandarte un saludo.
Por cierto tu pagina me gusta mucho,escribes y cuentas muchas cosas.
www.decoaire.com

Alfonso Saborido dijo...

YO lo necesito. Necesito de mis momentos de silencio. Para poder escuchar.

geminis dijo...

el sielncio puede ser un momento especial, sobre todo cuando estas en el ruido total durante el día.
besos

José Antonio del Pozo dijo...

Hermosa reivindicación del silencio escogido, del buscado, no del impuesto por la soledad no deseada. Me gustó también la desenvoltura poética de tu prosa,medida, que te lleva de la mano. Tuve yo hoy, en cambio, un sueñecito que pa qué... bueno, pues lo puse en mío bog y ya no fastidia tanto. Un saludo, mari paz.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Hay momentos en que ansiamos esa soledad. Tiempo que nos permita pensar, y saber quienes somos...

Saludos y un abrazo.

Anónimo dijo...

Maripaz, me he sumado por esta vez a la idea que engloba todo tu blog: dar a conocer la actividad de Guardo. Guardo, ganadora de Mi Pueblo es el Mejor. Te dejo el link.

http://losentresijosdelamoda.wordpress.com/2010/11/06/mi-pueblo-es-el-mejor-36/

Estupendo tu relato sobre el silencio.

¡Saludos!

Isabel Martínez Barquero dijo...

Sólo en el silencio recobro mi voz. Puede parecer una paradoja, pero es absolutamente cierto.

Un abrazote, Maripaz, y que te acompañe el silencio fructífero y creativo.

Liliana G. dijo...

Maravilloso texto, Maripaz, que pone de manifiesto esa capacidad que tenemos los seres humanos para adentrarnos en nosotros mismos y vernos y sentirnos desde un ángulo superior, desde el alma.
Y no es sino en ese silencio, en esa soledad buscada y atesorada, que lo podemos hacer.

Un beso grande, Maripaz.

matrioska_verde dijo...

Hay una frase muy bonita, no sé quién es su autor, que dice así: La verdadera amistad llega cuando entre dos el silencio parece ameno.
Tú hablas de otro silencio, del interior pero creo que está conectado con el otro.
biquiños,

Anónimo dijo...

El silencio es el que te dice en que condición estás, cuando estás dispuesto a escuchar su atractiva melodía con un trafondo agonizante.




Grácias.