30 de mayo de 2013

ELMO



Hoy os traigo la historia de mi amigo, Elmo. Un ejemplo de supervivencia  frente a la adversidad de la enfermedad. Se merece una entrada en el Baúl de Laika y se la quiero dedicar de manera muy especial.
En el vídeo que os adjunto, se puede ver una entrevista que le hicieron y donde nos cuenta su historia.


Conocí a Elmo, por casualidad. Yo grababa un vídeo del baile de boda de una amiga, y me llamó la atención él y su mujer por la alegría que me trasmitían al bailar. Era un grupo de gente joven divertida y alegre que disfrutaban de la boda de sus amigos, y Elmo era uno más. Más aun, pienso que era de los mas divertidos...por eso le grabé un buen rato.


Desde el principio me cautivó su sonrisa. Me trasmitía amor por la vida, las gentes, las cosas sencillas...
Para nada podía sospechar que desde muy joven había tenido que sufrir y que era un valiente.
Esta foto se la hice durante el Carnaval, me dedicó esta preciosa sonrisa cuando me vio.


Con el paso del tiempo y me parece que fue en Facebook, nos hicimos amigos virtuales, hasta que un día en el mercado pude abrazarle.
Desde entonces, no falla, todos los viernes nos vemos en  el mercado y mantenemos un rato de conversación como  buenos amigos de toda la vida. Y es que Elmo, se hace querer.


Elmo, tiene pasión por su hija Lorena, y le contagia sus ganas de vivir y su alegría. En esta bonita fotografía se les puede ver a los dos.


Elmo, es un enamorado de la naturaleza y de la vida. Me encantan sus fotos donde se le puede ver disfrutar de los encantos de la Montaña Palentina.


Como él mismo dice, cuando la vida te envía un aviso, la mayoría de las cosas que antes tenían importacia, nos parecen absurdas tonterías porque hemos descubierto lo que realmente importa.

Elmo, vive su vida con buen humor, y saborea  cada instante como algo único.

Elmo, gracias por tu preciosa sonrisa con la nos obsequias a todos. Te envío un beso y deseo que te vaya muy bien siempre.

26 de mayo de 2013

"NOCHES DE TANGO"



Con motivo del Dia Internacional de los Museos, pude celebrarlo asistiendo a un espectáculo en el marco incomparable de la Villa Romana la Olmeda.
La Villa Romana la Olmeda declarada Bien de Interés Cultural en 1996 corresponde a la época imperial de Roma y es una maravillosa herencia de la que se conserva su edificio principal y los restos de la enorme necrópolis lugar en el que reposa el mas grandioso mosaico policromado del mundo donde se reproducen dos escenas, una narra el episodio de Ulises en Skyros ornamentado con una bella cenefa con rostros- supuestamente retratos de los propietarios de la casa- y la otra reproduce escenas de caceria. Esta documentación la he copiado del Blog de Juan Carlos Garcia de los Reyes.



Los mosaicos se conservan en perfecto estado y es un placer  para los sentidos poder contemplarlos.


El espectáculo reunió todas las expresiones del tango argentino: el baile de la mano de Alejandra y Mariano, el canto y la poesía interpretadas por Patricia Nora y la música de la mano del Duo Mercadante - Batattaglia.


Marcelo Mercadante está considerado como uno de los mejores bandeonistas argentinos afincados en Europa. Con una trayectoria importante junto a Gustavo Battaglia y Andrés Serafini, Amelita Baltar, la OBC, el Cuarteto Araca, Joan Manuel Serrat, Miguel Poveda o Raynald Colom.


Me emocioné con Gustavo Battaglia y el maravilloso sonido de su guitarra acompañado de las notas del bandoneonista Marcelo Mercadante, dos grandes de la música. Fue una noche mágica hermanando al pueblo argentino y al castellano.


Patricia Nora con su preciosa voz y su garra removíó mi alma .Tanto es así que me olvidé de grabarla.


Alejandra y Mariano, pusieron con sus pasos de tango el broche final



Una agradable velada con mucho éxito

22 de mayo de 2013

VIVE, Y DEJA VIVIR


Mi filosofía de vida desde hace unos años es: "vive, y deja vivir". Quizá tengo ya una edad en la que importan solamente pocas cosas. Me gusta refugiarme en lo importante y salpimentarlo con la sal y el sabor de la experiencia.
A nuestro alrededor nos acosan cobardes ladrones del tiempo que tratan de meterse en los pliegues del alma y asfixiarla con cuentos y leyendas de viejas.

Aborrezco lo altivo, lo orgulloso, lo prepotente...todo aquello que borre en mi horizonte la belleza de la sencillez.

Me gusta la gente que me mira a la cara y puedo leer el fondo de su alma.

De niña aprendí de mis mayores, unos valores que guardo como el mejor tesoro, la mejor herencia, y procuro que no me deslumbre el brillo que se extingue con el paso del tiempo.


Me gusta vivir mi propia vida como yo quiero vivirla y haciendo oídos sordos a los perros que ladran en mi camino. No me interesa la vida de nadie, ni como quiere vivirla.

Procuro enterrar el rencor de mis viejas heridas para volar en libertad.

Me rodean, familiares y amigos, pero en el fondo he llegado a la conclusión de que cada uno solo se tiene a si mismo y procuro que esa sea mi fuerza para seguir viviendo.

Tomo de los días, la caricia del sol, el beso de la aurora, la pureza del agua, el trino alegre de un pájaro, la sonrisa de un niño, la mirada tierna de un anciano.

Me gusta contemplar a los jóvenes, aprender de su pura inexperiencia, aunque parezca un contrasentido, porque todavía no han llegado a perder la belleza de lo genuino.

A veces río, otras lloro...me gusta cantar a la vida, al amor, a las cosas bonitas...intentando llenar mis días de sueños por cumplir.

Prefiero correr un riesgo y equivocarme, a quedarme quieta, doblegada por el miedo.

Me gusta confiar en los otros, aunque muchas veces experimente la traición.

Soy por naturaleza impulsiva, apasionada, esto me lleva a meter la pata muchas veces.

Reconozco que a veces puedo herir aunque no sea esa mi intención, no en vano tengo dentro de mi la naturaleza humana con todo lo bueno y lo malo.

No puedo comprender a esas personas que todo lo juzgan sin piedad, que llevan chismes de acá para allá con la velocidad del viento huracanado, y aunque no deseo mal a nadie, espero pacientemente a que un día se revuelquen en su propio vómito.

Por lo demás, tengo poco que perder. Amo la vida sencilla, la gente de mirada clara, me conformo con lo que la vida me regala.

Eso si, quiero saborear cada instante que tenga de vida, porque amo la vida apasionadamente.



18 de mayo de 2013

EL CHUPETE


Me lo encontré llorando a mares. Era un niño muy pequeño de enormes ojos azules. Unas lágrimas enormes resbalaban por su preciosa carita y temí que inundara el mercadillo del viernes.

Me acerqué a consolarle de su pena. A su lado, su papá intentaba cogerlo de la mano porque temía perderlo entre la muchedumbre. En plena rabieta nada le importaba, solo llorar y llorar...

Me agaché para ponerme a su altura y tratar de llamar su atención. Era una monada de crío. Sus ojos claros tan bellos, tan puros, tan inocentes, me cautivaron. Su llanto era como si todo el dolor del universo se hubiera concentrado en aquel instante en que yo me atreví a mirarle.

-¿Que te ocurre?  le dije bajito,  intentando consolarle.
- Me miró con escaso interés, él seguía  con su tremendo dolor tratando de abrirse camino.
- Su padre me dijo sonriendo: "llora porque quiere su chupete".
-Sonreí intentado acariciarlo, pero no había manera.

De repente, mi amigo "Suco", me reconoció y se acercó cariñoso a saludarme.
Suco es un perrito chiguagua que desde que me vio por vez primera tuvo claro que quería ser mi amigo .
Desde entonces cuando me ve me reconoce y acude a mis brazos llenándome de lametones para demostrarme su cariño.

Aproveché aquel encuentro fortuito para llamar la atención de aquel desconsolado angelito y presentarle a Suco.

Poco a poco fue cambiando de actitud y su llanto  se fue serenando.
No se atrevió a acariciar a Suco, pero por un instante se olvido de su pena y se alejó con grandes suspiros .

Al poco rato lo encontré sonriente en brazos de su mamá que le ofrecía como premio un palote de gusanito.
Me volví a acercar a interesarme que tal iba su problema. La mamá que no había visto la escena de nuestro encuentro me miraba sorprendida.
 Una vez que le conté de qué nos conocíamos, me decía aliviada que habían conseguido una  nueva batalla en su particular guerra.
El pequeño en brazos de su madre había olvidado su pena y un poco su chupete, y es que los brazos de las madres lo curan todo.

Me aleje pensando en la importancia del "Chupete", "Chupeta" ,"Tete"," Bobo","Pipo," o como queramos llamarlo.

El chupete es el primer amigo que tenemos en nuestro reducido mundo de bebés.  Con él intentamos descubrir el universo a través del gusto,  es nuestro compañero de mimos y afectos. Además tiene un efecto pacificador, nos tranquiliza y calma cuando notamos los primeros encontronazos con la vida dura que nos espera.
Es el compañero que da seguridad al mundo de nuestros sueños.

Sobre él hay distintas opiniones de abuelas, madres, tías, amigas, y conocidas que a veces son verdaderos tratados.

Es lógico que nos cueste tanto dejarlo perdido en una rama, como el de la foto, y seguir nuestro propio camino en la vida. Nos unen demasiadas vivencias en los primeros años de nuestra vida, hemos aprendido al calor de sus chupetones a superar nuestros primeros dolores infantiles.

Quizá en nuestro caminar de adultos quisiéramos muchas veces quedarnos de nuevo dormidos y refugiarnos bajo sus inocentes besos.




12 de mayo de 2013

LA CUMBRE


Amanecía hoy un poco triston el día, pero a media mañana ha ido levantando y por fin el tímido sol se atrevía a hacer acto de presencia.

Me gusta el sol, no puedo evitarlo. Quizá han sido muchos los años pasados en el sur, por eso cuando me falta, le echo de menos.

Me gustan también las montañas, no en vano mis raíces provienen de las montañas leonesas y mis recuerdos están ligados a ellas.


Después de comer he decidido perderme por algún lugar distinto de los habituales por donde me muevo, con mi cámara, aprovechando la luz de la tarde.


Comienzo mi paseo por el Barrio Valdecastro no sin antes hacer una fotografía a la entrada.


Delante de una casa veo de lejos a alguien tomando el sol, le vislumbro pequeño, demasiado pequeño...cuando llego a su altura veo que es una enorme muñeca. De repente una niña sale a mi encuentro y me enseña sus juguetes. Viene a buscar a su amiguita.
-Quizá este durmiendo la siesta, le digo.
-No nunca la duerme, me responde pizpireta.
- ¿ y tu? le pregunto.
- No, nunca me ha gustado dormir la siesta, me dice divertida.
- Igual que a mi, le respondo.
Le digo adiós y me adentro por una calle empinada.


Mi idea es subir hasta el antiguo depósito del agua. Está un poco alto, pero acabo de descubrir el botoncito de mi nueva cámara para hacer fotos panorámicas y me puede la tentación.

Ese lugar ya siendo niña ejercía sobre mi una influencia especial, y junto con mis amigas formaba parte de nuestro lugar mágico donde solíamos perdernos con frecuencia.



La subida es sencilla, hay un camino que te anima a subir, y subir... sin darte apenas cuenta que luego tienes que bajar.
En unos minutos estoy arriba. La tarde se para por un instante, mientras el aire y el sol me besan la cara con descaro.

Miro hacia abajo y el paisaje es espectacular. Me siento en la hierba y respiro con fuerza. Si la felicidad tuviera nombre, yo le llamaría atardecer.



De repente, un enorme pájaro me pasa rozando la cabeza, y siento la libertad susurrándome al oído.
Un cúmulo de sensaciones nuevas recorren mi alma, y saboreo la vida con toda la intensidad de que soy capaz.


Bordeo por otro lado para hacer una fotografía desde otro ángulo y con otras vistas del pueblo.
Es magnífico lo que veo.


El viejo depósito del agua testigo mudo de tantos, y tantos secretos... se sonríe viendo mi alegría casi infantil

Es como una vuelta a la niñez.


Allí subida puedo ver las casas de siempre cada una con una historia...



Lo peor ha venido al bajar. Todo iba bien hasta darme cuenta que tenia que saltar un desnivel del terreno y me he olvidado de ser prudente.
He calculado mal pensando que era mas corto y me he lanzado a cuerpo muerto con toda la fuerza. Menos mal que no he ido a parar al suelo, pero para poder frenar he hecho un esfuerzo enorme con las rodillas, y la izquierda que ya de vez en cuando la noto rebelde, se ha llevado la peor parte.
Creo que me he hecho daño.
Ya os contaré. He llegado a casa medio coja y he tenido que suspender mi paseo.

7 de mayo de 2013

ASÍ ERA ELLA


No era ni muy alta ni muy baja, ni muy guapa ni muy fea, ni muy lista ni muy tonta..

Era un talento medio como la mayoría de los seres humanos, pero sabía amar la vida, saborear instantes.
Con sus viejas zapatillas, compañeras de viaje, recorría caminos, inventaba poemas, abrazaba a los árboles, saludaba al sol y le gritaba al viento.

Tenia un puntito de locura que la hacia eterna . Era lo que vulgarmente se suele conocer como una de tantas...pero más de una vez se atrevió a plantarle cara a los que se atrevieron a murmurar y emponzoñar sus sueños.

En su vida anónima como tantas vidas, dejo jirones de su piel por las esquinas, tuvo tiempo de experimentar la belleza del ser humano y la vileza con toda su crueldad.

Vivió momentos sublimes y lloró copiosas lágrimas. Conoció lugares variopintos, gentes sencillas, gentes cultas, personas egocéntricas, mujeres de mirada clara, hombres honrados.
Descubrió el lado mas amargo de las circunstancias, superó mil traiciones sin cuento.

Amó y fue amada, dejando un camino a su paso para futuras generaciones, sembrando con generosidad

Y a pesar de ser un talento medio, todavía la recuerdan aquellos que tuvieron la enorme suerte de cruzarse en su camino como se recuerda a alguien muy importante, porque somos lo que vivimos y la huella que dejamos.