14 de diciembre de 2009

EL BALCÓN

Se asomaba al balcón con la impaciencia de los amores intensos,con una esperanza y un anhelo en el corazón, como presintiendo la belleza de la vida en cada amanecer.

El cielo estaba un poco mas cercano, El infinito como preludio de lo eterno se asomaba con todo su esplendor, venciendo la monotonía que hace estériles los sueños.

Las nubes silenciosas observaban su pelo y su bella mirada.

La espera se llenaba de eternidades atrapando las horas con impaciencia.

Alegría contenida hecha de poemas y luces de colores.

Lugar donde se fragua la incertidumbre de la espera.

Encuentros donde vaciar el alma, compartiendo las pisadas del camino, aliviando un mañana.
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