27 de noviembre de 2014

AUSENCIAS



                       ¿ Por qué aunque se te espera
                        nos sorprendes
                        en el silencio de la noche oscura?

                         Y al pensar que no volveré a verte
                         se me llenan las entrañas
                         de amargura?

                         Mi corazón herido
                          añora tus besos
                          encendidos
                     

                         Nunca es la muerte bienvenida
                          aunque se la espere
                          no es dama que cautive con sus placeres
                          más bien se lleva cautivos nuestros amores
                          dejándonos huérfanos de amaneceres.

                           Hay despedidas que son para siempre
                           grabándose a fuego, silenciosamente
                           besos y lágrimas desordenados
                           en las despedidas de los seres amados.


                          M.Paz.





                       

                       

 
                  

20 de noviembre de 2014

AMORES


Atardecía, y el sol se despedía en el horizonte con sus destellos color rojo llenado de poemas sin estrenar aquel lugar.
Carmela, una mujer frágil, de edad avanzada, con su bastón en la mano acompañada de su gato rumiaba su soledad a la puerta de su casa.
Tenía unos ojos claros de mirada intensa y porte señorial. Se adivinaba en ellos un halo  de melancolía causada por la ausencia de su esposo muerto apenas hacia unos pocos años.
Hablaba bajo, despacio, como en confidencia con el felino.
-Me hubiera gustado tener hijos, sabes?
- También a él.
-Pero no vinieron.
- Aunque siempre esperamos los dos que se cumpliera en nosotros la voluntad de Dios, la vida nos fue llevando de la mano por distintos derroteros siempre en la soledad de un matrimonio bien avenido.
-Viajamos bastante y vivimos la vida intensamente.
-Yo, sabes, siempre quise ser madre, pero no pude hacer realidad ese sueño y siempre me acompaña ese deseo.
-No me atreví a repetírselo más, desde el día en que me dijo que así estábamos muy bien los dos solos. Según él se había pasado el tiempo y tener un hijo era una aventura arriesgada para la que ya no se sentía preparado.
-Mi resignación me llevo a olvidarme de mi sueño pudiendo condescender por el amor que le profesaba.
-Y ahora que él no esta, la soledad me consume entre las paredes de nuestra casa.
El gato parece entender la historia de su dueña, pues hace tiempo que es su confidente.
 Cuando ella ha terminado de hablar, el gato se acurruca a su lado como para darle a entender que esta allí para lo que haga falta, para lo que necesite...
Ella, le acaricia lentamente, mientras el sol les guiña con complicidad y se despide hasta mañana.
Juntos se adentran en la vivienda pues el frío ha hecho su aparición.
La noche se encargará por unas horas de ocultar ese secreto de su deseo que se quedó perdido en el camino de su vida.



Rocio, aún recuerda su primer amor. Un amor que conserva idealizado con la ilusión de adolescente echa carne en su alma en pena.
Cuenta una y mil veces la misma historia, el mismo instante en que se enamoró de él. Es como si hubiera quedado grabado en su alma, y esculpido en la roca de su corazón marchito por el paso de los días.
Nunca puso en duda lo que soñaba vivir junto a su amado. Tenía la fuerte seguridad de sus afectos que la llevaban en volandas por un mundo imaginario de sentimientos compartidos al unísono.
Creyó haber encontrado la plenitud de la belleza en aquel ser.
Se dejó llevar por el corazón sin atender los sabios consejos que se le presentaban insidiosos.
Cuando tuvo oportunidad, dejó al descubierto su interior esperando recibir el mismo trato. Desnudo su alma sin cautela alguna, abriéndose de par en par.
Desarmada y sin aliento, quedó presa de un amor no correspondido.
Aún con el paso de los años, busca una y mil escusas para seguir pensando que él la amaba.
Quizá es que lo que no vivimos pero anhelamos vivir, nos marca de por vida, aunque solo sea algo que nuestra imaginación ha agrandado hasta el extremo de hacerlo imprescindible.
Solo las vivencias son capaces de dejar huellas reales en nosotros. Todo lo demás se queda pendiente para una nueva oportunidad.



Javier, amaba a alguien que le estaba prohibido. Quizá se había empecinado precisamente porque lo prohibido ejercía en él un poder de seducción enorme.
Siempre le había gustado arriesgar en el amor. Su espíritu aventurero le había llevado de acá para allá sin dejarse llevar por los miedos existenciales que azotan la mente de cualquier mortal.
Solía cuestionarse muchas veces, que quienes dictaban las prohibiciones no tenían todos los datos para juzgar, y como consecuencia todo era muy relativo a la hora de zambullirse en el mundo de los sentimientos.
No podía, ni quería dejar pasar el amor que la vida le brindaba. Estaba dispuesto a cualquier cosa: saltarse las normas, ir contracorriente, plantar cara al enemigo, cortar amarras para siempre...
Todo menos rendirse ante una evidencia que no dejaba lugar a dudas.
 ¡Se había enamorado!
Su ternura exquisita, su sensibilidad a flor de piel, su atrevimiento, su mirada del mundo con sus bellos ojos negros, le parecían suficiente bagaje para competir con lo prohibido.
Podía ser una lucha ardua e incierta, pero estaba dispuesto a no desertar del campo de batalla.
Lo tremendo es que las luchas cuerpo a cuerpo suelen ser dolorosas y dejan cicatrices.
Al otro lado de la balanza estaba el amor como contrapartida.
En el amor, unas veces se gana y otras se pierde, pero siempre deja una huella indeleble para el resto de la vida cuando nos encontramos cara a cara con él en nuestro caminar.
Al final, solo el amor nos redime.

M.Paz.


13 de noviembre de 2014

MOMENTOS



La vida, son momentos.Momentos, llenos de vida.
Momentos intensos, felices, dolorosos, maravillosos, eternos, apasionados, locos, mágicos, ilusionados, angustiosos, decepcionantes, redentores, traicioneros...
Momentos que conforman  nuestro vivir para siempre.
Momentos en el tiempo que nos ha sido dado.
Infinidad de momentos que componen nuestro día.
Momentos grabados en nuestra retina como una maravillosa película de aventuras.
Momentos en los que la belleza nos inunda y nos damos cuenta de nuestra propia pequeñez.
Momentos de los que por más que lo intentemos no logramos olvidarnos.
Vida llena de momentos en los que amamos y fuimos amados, pedimos perdón y perdonamos, sonreímos y lloramos.
En un momento se puede percibir la maldad y la bondad humana.
En un momento uno es capaz de volver a empezar de nuevo.
Un momento de amor puede redimir toda una vida.
Momentos de traiciones que no logramos comprender.
Dolorosos momentos como compañeros de viaje.
En ese ir y venir por la vida, momentos, momentos, momentos...siempre nos acompañan.

M.Paz.

6 de noviembre de 2014

LIBRERÍA GUARDOCOPI


La librería "Guardocopi" se jubila.


O más bien su dueña, Raquel. Después de 27 años de servicio ha llegado la hora de descansar.
Su andadura comenzó allá por el año 1987 y estaba enfocada a librería y papelería con muebles de oficina. Fue de las primeras en tener el servicio de encuadernación, plastificación, fax. Ahora esas viejas máquinas se venden junto al local.
La nostalgia acompaña a esta despedida, porque cuando una librería muere, también se muere un poco de nuestra propia historia.


Siempre me han fascinado las librerías. Desde muy pequeña me gustaba comprar mis gomas Milan con ese olor tan peculiar, los bolis, los lapiceros...
Con las pocas propinas de entonces, yo me sentía la niña más feliz del universo cuando acudía a comprar un cuento de la colección "Azucena" para luego envolverme en la magia de las letras.
Me encantaban los pliegos de recortables donde podía vestir a mis  muñecas de papel con variadísimos modelos cada cual más original. Mi imaginación me llevaba por caminos y veredas donde la curiosidad era su punto de partida intentando descubrir el mundo .
Aun miro con afecto la "Librería Tejerina" recordando la sonrisa de Vicenta y su buen hacer a la hora de atenderme cuando iba a comprar.


Me consta que Raquel, también ha sido una buena profesional y dejara la huella de su trabajo en ese rincón donde ha pasado tantas horas con el público.
Pienso que los libros que han salido de allí, tienen vida propia, y caminan por las calles del pueblo, por los hogares,por las manos de niños y mayores.
Gracias, Raquel por tu aportación al mundo de la cultura con estos años de trabajo callado y silencioso. ¡Gracias!


Yo seré la primera en echar de menos el escaparate. Solía cambiarme de acera para ver lo allí expuesto buscándome necesidades ficticias para poder llevarme algún tesoro a casa.


Los últimos objetos son vendidos a bajo coste por la situación. Me imagino que si pudieran hablar, contarían el maravilloso cuidado que han recibido y la nostalgia que sienten de su marcha.
Porque a mi me gusta pensar que los objetos viven con nosotros con vida propia peculiar y nos unen a ellos lazos afectivos de alguna manera.


Para que quede en la memoria de todos, os dejo este vídeo de la tienda lleno de vida, y dedico esta entrada a todas las librerías del mundo como homenaje.
 A través del cristal del escaparate se puede ver al niño de mi amigo y a su abuelo contemplando extasiado la magia de ese rincón de la librería, como tantas veces lo hice yo.

M.Paz.

1 de noviembre de 2014

CAMPOSANTO


Camposanto, refugio último de nuestro andar peregrino. Morada eterna del caminante. Descanso en paz, en  tierra sagrada.
Sintiendo la incertidumbre de llegar a la meta.


Sentido sagrado de nuestro paso de la Vida a la Muerte.
Polvo, que al polvo vuelve.
Y la nada amenazante insinuando su llegada.



Rezos, flores, ofrendas.
Réquiem aeternam dona ei domine.
Tradiciones ancestrales.
Sentido religioso.


Lugares santos
Horizontes efímeros de vida.
Fríos sepulcros de podredumbres malolientes.
Aferrándonos al más allá.



Recuerdos de seres amados.
Corazones rotos por la nostalgia.
Esperanzas de nuevos encuentros al atardecer.