Con parsimonia iba deleitándose cámara en mano y saboreando la brisa de la tarde, cuando de repente, se sintió observada con insistencia. Miró a un lado y a otro sin ver a ningún ser humano cerca en aquella solitaria calle, pero aun así, percibía con enorme intensidad que unos ojos burlones la asediaban mientras iba subiendo la cuesta.
Apuró el paso con temor de que aquel fantasma la alcanzara, y suspiró cuando a lo lejos sintió el motor de un coche que pasaba por la carretera. El conductor no pudo reprimir una irónica sonrisa al verla con la cámara en acción pasando de largo después de saludarla .
Su inquietud se iba haciendo cada vez mas grande, incluso decidió cambiarse de acera por si acaso. No, no estaba segura allí. Escudriño balcones y ventanas, puertas, esquinas, callejas...De repente, allí estaba él ; el mismísimo Fernando Alonso sonriendo en la ventana de enfrente.
Se ruborizó un instante, pero inmediatamente disparó una y otra vez el objetivo mientras la adrenalina se hacia presente de manera especial ¿ podía ser posible estar fotografiando al campeón de campeones en aquella ventana de la villa de Guardo?
Se frotó los ojos con insistencia colocándose las gafas para ver con nitidez hasta convencerse de que había sido una ilusión óptica que la había llevado a pensar en el reportaje de su vida.
Un Fernando de cartón la sonreía insistentemente.
Apuró el paso con temor de que aquel fantasma la alcanzara, y suspiró cuando a lo lejos sintió el motor de un coche que pasaba por la carretera. El conductor no pudo reprimir una irónica sonrisa al verla con la cámara en acción pasando de largo después de saludarla .
Su inquietud se iba haciendo cada vez mas grande, incluso decidió cambiarse de acera por si acaso. No, no estaba segura allí. Escudriño balcones y ventanas, puertas, esquinas, callejas...De repente, allí estaba él ; el mismísimo Fernando Alonso sonriendo en la ventana de enfrente.
Se ruborizó un instante, pero inmediatamente disparó una y otra vez el objetivo mientras la adrenalina se hacia presente de manera especial ¿ podía ser posible estar fotografiando al campeón de campeones en aquella ventana de la villa de Guardo?
Se frotó los ojos con insistencia colocándose las gafas para ver con nitidez hasta convencerse de que había sido una ilusión óptica que la había llevado a pensar en el reportaje de su vida.
Un Fernando de cartón la sonreía insistentemente.
11 comentarios:
Guauuu, a mí me hubiera dado un vuelco el corazón hasta darme cuenta de que se trataba de un muñeco de cartón.
Un beso Maripaz.
Por eso sonreía insistentemente, porque era de cartón. Estoy pensando en hacerme de una imagen a tamaño natural de quien yo me sé, a ver si es capaz de conservar la sonrisa un minuto.
Un abrazo.
Muy bueno.
Estaba asomado a la ventana porque tenía el coche mal aparcado y bajar si se lo llevaba la grua... un saludo.
Qué mira Fernando? A Vettel que pasa?
Te aplaudo Maripaz. Bueno.
Besos y gracias por tu compañía. Cuídate mucho.
SEGURO QUE QUIEN VIVE ALLI, ESTARA DISFRUTANDO DE LA REACCIÓN DE LAS PERSONAS AL VER A FERNANDO ALONSO EN LA VENTANA. YO TAMBIEN HABRIA CAIDO.bESITOS.
Y esas siluetas de cartón parecen terriblemente reales, que si no son de un hombrote como Fernando, que es para derretirse, otras meten miedo :)
Excelente, Maripaz, me has hecho sonreír con tu deliciosa historia.
Un beso grande, querida amiga, y encantada con el reencuentro.
Pues con lo dificil que pillarle sonriendo, es todo un logro.
Besos
Bueno pudo haber sido...
El forofismo no tiene límites.
La imagen es muy divertida y la has aprovechado muy bien.
biquiños,
Publicar un comentario