1 de diciembre de 2025

COMPARSA DE GIGANTES Y CABEZUDOS DE ZIZUR.

 


Hace ya casi ocho años menos algún mes que llegué a vivir a Zizur y desde entonces me encuentro integrada siendo una zizurtarra de pro.

Me gusta cuando llego a un lugar nuevo hacerme una más para aprender.


Cuando descubrí la Comparsa de Gigantes y Cabezudos me quedé fascinada por la alegría que trasmiten, por su colorido, por la belleza y pericia de sus pasos de baile y, por lo que significa de tradición.


Me dejé llevar por su magia recorriendo calles y plazas tratando de bailar al unísono con ellos mientras les grababa o hacía fotografías.

Es muy bonito, y de agradecer, que la gente se implique para llevar a cabo esta tradición, poniendo su tiempo a disposición de las nuevas generaciones y darle continuidad.


Los niños desde muy pequeños acuden a ver a estos gigantones que les sonríen desde arriba con complicidad o intentan zafarse de los kilikis que les persiguen por las calles.



Incluso les conocen por sus nombres: Mayordomo y Mayordoma, Sol y Luna.

Pues de alguna manera, esos seres majestuosos, conservan también su alma de niños y son capaces de crear a su alrededor, con sus bailes, la magia y la ilusión más bonita.


Una nena que estaba a mi lado se envalentonaba al ver bailar a los gigantes y se atrevía a decir a su mamá que era capaz de mover ella sola un árbol.

Y lo decía con enorme seguridad a pesar de sus pocos años, viendo a estos gigantones de mirada pícara y traviesa que la transportaban a un lugar donde es posible hacer realidad los sueños.


Pero quería contaros el ritual a la hora en que termina el desfile por calles y plazas y son transportados en un camión hasta el pueblo donde van a quedar guardados hasta la próxima salida.



Con un esmero casi paternal y maternal, les limpian cuando les sorprende la inesperada lluvia.


Les cubren con unas fundas de tela para que no sufran desperfecto alguno durante el viaje.



Uno a uno van pasando por las manos de los que ocultamente les dan vida debajo del enorme armazón y les hacen bailar al son de la música.


No os podéis imaginar la ternura y cuidado que ponen en cada pequeño gesto, minucioso y concienzudo hasta verlos encima de la cabina.



Hasta pareciera que los gigantones hablasen entre si, comentando el enorme corazón, también gigante, de esos muchachotes.


Todo, bajo la atenta mirada de grandes y pequeños.


Que absortos no se quieren perder el ritual.


Una vez que la operación ha terminado, alguno de los chicos serán los encargados de llevar a feliz término esta hermosa aventura.


Atrás quedan las miradas infantiles, testigos curiosos y receptivos, que dormirán pensando en volver a verlos bailar en la mañana de fiesta.

El esfuerzo de estos muchachotes de corazón enorme y amantes de la tradición no será en vano.

Habrán prendido la mecha para que los que vienen detrás continúen. 

Hermosa labor.

12 comentarios:

ETF dijo...

Maripaz, tus imágenes no solo muestran la tradición, la iluminan: cada gesto y cada color parecen bailar contigo. Es tui forma de ver el mundo lo que me maravilla.
Un fuerte abrazo.

Macondo dijo...

En mi ciudad (Zaragoza) también son famosos los gigantes y los cabezudos.

Arantza G. dijo...

En Vitoria Gasteiz también los hay. Algunos peques les temen pero animan las calles en Fiestas. Un abrazo, Maripaz

Sara O. Durán dijo...

Ha de ser muy atractivo y fantástico verlos en toda la dinámica de la traición.
Un fuerte abrazo.

Tomás B dijo...

Un elemento festivo muy arraigado en muchas localidades.

Saludos.

Mónica dijo...

Pero que maravilla, Maripaz. Veo que no paras, eso es bueno. Osea fantástico que bailes en fiestas. Aquí también salen los gigantes o los cabezudos a las calles y Plazas. Es importante que se mantenga lo tradicional de una gestión a otra. A mi me gusta ver las personas disfrutar de lo bueno de la vida.
Un abrazo.
Mónica.

TORO SALVAJE dijo...

Gigantes y cabezudos: una tradición muy entrañable.
Aquí también hay.

Besos.

Lu dijo...

¡Qué preciosidad! Me encantan las tradiciones Maripaz, me encantan esos gigantes y más me encanta tu manera de contarlo.
Va mi abrazo
¡Disfruta del finde como bien sabes hacerlo!

diego dijo...

Excelente reportaje, Maripaz. Creo que deberían nombrarte Hija Predilecta de Zizur, te lo mereces :)
Un abrazo gigante y cabezudo :)

Solddad dijo...

María Paz . Alguien me dijo que los Navarros son de oro. Difícil entrar, pero una vez dentro no te dejan salir 😘😘

Mara dijo...

Hola Maripaz. En León también hay gigantes y cabezudos. Me has hecho pensar en el enorme trabajo y delicadeza que muestran los que los montan, algo que nunca tuve en cuenta.
Besos.

Manuel dijo...

Cada vez que veo y te leo sobre algunas fiesta de gigantes y cabezudos, disfruto de lo lindo, ya que siéndote sincero y a pesar de lo mucho que he viajado y viajo, nunca he coincidido con fiestas de este tipo, así que me hace mucha ilusión el verlas a través de tus imágenes, y con tu linda y sencilla narrativa, que es lo mismo que si estuviera allí y, acompañada de la mejor cicerona de este hermoso y bello país.
Un fuerte abrazo, amiga Maripaz.